01/07/14
Anoche me dormí llorando, primera noche sin ti y me he despertado como si todo fuera una pesadilla, y no he podido evitar volver a llorar.
Es tan grande el vacío que has dejado con tu partida al otro lado del arcoiris, que me cuesta hasta respirar.
Me han faltado 10 años junto a ti, aunque sí hubiera sido por mi no te hubieras ido nunca, porque eres lo más importante de mi vida, por lo que iba a trabajar, sólo para sacarte adelante.
Hace unas horas estabas junto a mi pecho y parecías tranquilo, te escuchaba respirar y sentía tu corazón latiendo y aún no me puedo creer que no volveré a tenerte así, que no volverás a mirarme con esa carita de curiosidad y de travieso.
Me acuerdo de tantas cosas, del primer día que fui a recogerte, eras tan pequeñito y tenías tanta vitalidad. Todo lo que estuviera a tu alcance iba a parar a tus dientes, para ti todo eran juguetes.
No te merecías que te pasara esto, no te lo merecías porque a pesar de que fuiste muy trasto los dos primeros años y que ya estabas calmado siempre fuiste muy bueno.
Tenía tanto todavía que darte, tantos besos, caricias, paseos por la playa...
Sólo espero que allí donde estés puedas campear y correr como a ti te gustaba. Y que el tiempo allí pase mucho más rápido y que cuando menos te lo esperes nos volvamos a encontrar.
Yo aquí te recordare todo el tiempo, porque tu eres mi corazón, mi angelito pelirrojo.
Espero que no te olvides de lo mucho que te quiero porque cada día te lo recordare porque espero que puedas escucharme.
Tu no te lo merecías, eras bueno y puro y no te merecías esta terrible enfermedad que sólo nos dio 6 meses más juntos.
Pero ya no podía ser más egoísta y retenerte sabiendo con toda probabilidad que estabas sufriendo. Eras tan bueno que no te quejabas por nada, ni los pinchazos de cada día ni el dolor que posiblemente debías tener en los músculos por la debilidad que cada día aumentaba a pasos agigantados.
Eras tan bueno. Eres tan bueno, tan puro.
Me quema por dentro tu ausencia. Lo eres todo para mi, eso no va a cambiar. Mi niño precioso.
Tu eres mi ángel de la guarda y ahora te están poniendo unas grandes alas allá donde estés, debes volar alto, espérame porque algún día volveremos a vernos, volveremos a estar juntos.
No tengo consuelo, quisiera que todo hubiera sido una mala pesadilla y despertarme y volverte a ver como siempre junto a mi.
Me gustaba tanto como te acurrucabas junto a mi para dormir, te amoldabas perfectamente, éramos como dos piezas de puzzle.
02/07/14
Ya han pasado dos días, aún tengo la ilusión de que voy a abrir la puerta de la habitación y te vas a abalanzar sobre mi dando saltos de alegría.
Tengo el cojín que te ponía para que estuvieras cómodo en la silla que aún tiene tu olor y lo voy oliendo para imaginarme que aún te tengo entre mis brazos.
Es tan grande la angustia.
Espero mi vida que estés donde estés seas feliz y que no tengas dolor.
Se que algún día volveré a verte y que todo este dolor será un vago recuerdo y podremos volver a estar juntos por siempre.
Sabía que te irías pero no esperaba que fuera tan pronto, me faltaron 10 años junto a ti, aunque sí hubiera sido por mi, no te hubieras ido nunca. Eras tan joven, tan vital... Y maldigo la enfermedad que te devoró en tan sólo 6 meses.
Me gustaría haberte dado más, haber estado mucho más contigo.
Te ame desde el primer momento en que te vi, te ame cada segundo que paso desde entonces y te amaré hasta el fin de mis días y más allá, porque sé que ni muerta te dejare de amar.
Max te ame, te amo y te amaré.
Descansa en paz.
Max
D.E.P
06/01/2010 - 30/06/2014
Amado perro, compañero y amigo.
Excelente hijo, tu madre Eli que te ama y te extraña.
