Todo ha salido bien y ahora tendrá que estar dos días ingresado con suero y sin comer nada.
Llevamos desde diciembre de veterinario y cuando empezó jamás pensé que esto le podría pasar. Siempre en estos 4 años juntos, ha estado sano, fuerte y loquito.
Era el loco Max, era mi soporte para seguir adelante, por lo que me levanto cada día y ahora más que nunca me necesita hasta todo lo que se pueda, el no se rinde y yo tampoco.
Voy a luchar por ti con uñas y dientes, porque te amo con todas mis fuerzas y te mereces ser feliz.
Eres lo mejor.